domingo, 17 de enero de 2010

El antes y el ahora en Haití

En el país más pobre de América el ambiente es más irrespirable que nunca. No es casual que las catástrofes naturales siempre causen mayores desgracias en países que no tienen medios para defenderse de ellas. Por no tener, un gran porcentaje de sus habitantes no tiene ni qué llevarse a la boca, pero eso ya era una constante antes del terremoto del 12 de enero de 2010.

Provoca una enorme tristeza la devastación de parte del país haitiano, sepultado bajo sus precarias construcciones, el ver todo ese sufrimiento humano y también que conozcamos ahora a los muertos de Puerto Príncipe sin apenas haberles prestado atención cuando estaban vivos. No es el caso de fotógrafos como Patrick Farrel (ganador del Premio Pulitzer de fotografía en 2009), que ya retrató en su día la indefensión de Haití ante otras catástrofes naturales (no de tanta magnitud como la actual) y reflejó la pobreza en sus calles, frente a la imagen de Haití como destino paradisíaco de los folletos turísticos que (obviamente) no muestran la otra realidad del país: la miseria, el abandono, el caos institucional, la corrupción, la violencia urbana y la falta de medios para la atención sanitaria (por lo que, por ejemplo, Médicos Sin Fronteras está presente en el país desde 1991).


Ahora vemos cifras de muertos calculadas “a ojo” e imágenes de excavadoras que transportan cuerpos como si se tratara de mercancía, pues los haitianos ni siquiera pueden enterrar dignamente a sus muertos. Una vez más también aparece en escena el sensacionalismo y la posible falta de ética. En todos los casos son fotografías que reflejan mejor que mil palabras el dolor de los haitianos, pero en momentos como este hay que tener especial cuidado a la hora de distinguir entre lo informativo y lo morboso, pues muchas de esas imágenes resultan demasiado explícitas (en las Cartas del lector de los periódicos nacionales ha quedado de manifiesto la disconformidad de más de uno con las fotografías publicadas). Por otro lado, la mayoría de informaciones aparecidas en esos medios no profundizan en la tragedia (se olvidan de su función de análisis y de denuncia) o versan sobre la indudable grandeza individual de los miembros de los equipos de rescate, pero no sobre la reinante injusticia global. (Caso aparte -por tratarse de un vídeo y no de fotografías- el de TVE, que erró en la emisión de un vídeo que no se correspondía con este terremoto).


Haití, antiguo país colonial que posteriormente fue controlado por varios dictadores, ha sido olvidado durante años por la comunidad internacional y, sin embargo, ahora la gran potencia mundial no ha tardado en aparecer como la encargada de su reconstrucción política y económica. Parece que tampoco es casual que hasta que no se llega a una situación tal de caos, hasta que no ocurren desgracias como ésta, el interés sea mínimo. Claro está que la actual es una situación excepcional, pero precisamente porque nadie antes se había preocupado por los problemas de Haití, por su ahogamiento en la deuda externa, nadie estaba interesado en su desarrollo durante los años previos a esta catástrofe (natural, sí, pero más profunda que eso, también).

Ya veremos dentro de unos meses qué cobertura informativa realizan los medios sobre lo que suceda en ese territorio fantasma y ya comprobaremos cuáles han sido las respuestas políticas a largo plazo. Ahora mismo sólo cabe pedir solidaridad y ayuda para Haití, desde ya y en adelante (aunque dejen de aparecer imágenes en los medios cada día).

14 comentarios:

  1. Genial la entrada, la verdad es que lo que está pasando en Haití me ha impactado bastante, y todas esas imágenes que se muestran en la prensa y en la televisión son escalofriantes. Como dices a ver a largo plazo cual es la cobertura informativa y sobre todo las respuestas politicas...

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  2. ¡Qué gran blog, Nerea! La verdad que este tipo de blogs son necesarios, hablar de lo importante, de lo humano, me gusta mucho. Un saludo, me hago seguidora (http://disfrutandosano.blogspot.com , este es el mío)

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  3. Muy trágico, sí... ahora hay que buscar las respuestas a tanto caos y a tanto futuro incierto y pensar en lo que sucedía años antes.

    ...y ¡gracias por leerme, Sara! :)

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  4. Tienes razón en dudar del tratamiento de los medios, y no es sólo Haití, cada día vemos imágenes más sanguinolentas de Kabul.
    Existe una escala de valores a la hora de hacer fotografías espantosas : a los ricos no se les ve la cara, pero a todos aquellos que viven más lejos de 1000km y sean pobres, por supuesto que sí.
    Creo que es una idea un tanto distorsionada de mostrar la realidad de las cosas, porque acaba por hacernos indiferentes a esas desgracias.

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  5. Yo no comparto la opinión de aquellos que dicen que hay que mostrar absolutamente todo, no creo que unas vísceras en primer plano aporten nada a la información, aparte de que sí, el baremo a la hora de mostrar esas escenas no es el mismo para todos... muertos de primera y de segunda, como se suele decir. Y como tú dices, se corre el peligro de caer en la indiferencia (porque claro, como no nos afecta directamente... en fin)

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  6. Bueno no sé si últimamente Haíti era recomendado en folletos turísticos, lo poco que sé sobre eso es que si viajas a la República Dominicana, te aconsejan en cualquier hotel que bajo ningún concepto cruces la frontera. Aunque la verdad es que sigue siendo la misma isla "paradisiaca". Supongo que esos turistas bastante tienen con el sol y los cubatas para preguntarse porqué, al menos en la mayoría de los casos. Porque desde luego aquí nadie, haya ido allí o no, habla sobre ello; aunqeu ahora que lo vemos en la tele parece que todo son donaciones. Y yo no digo que este mala, sino que parece que hasta que no ocurre algo terrible y nos lo ponen en el plato "nadie" se preocupa, o hay muy pocos que se puedan llamar a sí mismos nadie.

    Estados Unidos es un gran oportunista, y para una vez que no tiene que inventarse nada para controlar un sitio, como si de la mano de dios se tratará. Lo peor en estos casos sería que no hubiera aparecido habría gente que se llevaría sus manos a la cabeza diciendo ¿ Pero es que EEUU no va a hacer nada? ( Cómo si fuera el padre que deja morir a sus hijos ). Pero bueno, eso no creo que ocurra al menos por el momento.

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  7. Seguro que cuando pase la fase de emergencia se vuelven corriendo, sí sí... es que cada día que pasa es más evidente.

    a propósito de esto y de la organización de los haitianos: "Santa Claus nunca llevó metralleta para regalar"

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  8. A mí nunca me ha gustado el doble rasero que se usa en fotografía, Haití es una muestra más. ¿Habríamos sacado así a las víctimas del 11-M, el terremoto de Italia el año pasado? Vemos como algo normal que personas de Asia, África, Sudamerica... aparezcan de cualquier forma en los medios, pero cuando la persona que sale, por su cercanía podriamos ser cualquiera de nosotros, entonces nos escandalizamos. Pero no sólo pasa con tragedias: gente en la calle, niños...en éso también hay doble rasero.

    Estupendo post.

    Un saludo

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  9. Completamente de acuerdo con tus palabras, Paco. Haití es sólo un ejemplo más de las malas prácticas informativas que se llevan a cabo cuando no se trata de ciudadanos occidentales. Gracias por dejar tu opinión.

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  10. Totalmente de acuerdo, Nere. Me parece acojonante tu entrada y me da igual que suene mal esa palabra.

    He visto en las noticias, al mediodía, que las mafias de tráfico de personas se están beneficiando de la situación de caos en Haití para raptar niños de los hospitales y de las calles. Creo haber escuchado algo así como que 15 niños habían desaparecido en los últimos días. Sólo me lo parece, porque los números no son lo mío y porque la noticia fue terriblemente breve: tenían que poner imágenes de personas peleándose por comida.

    A este paso, van a ser necesarias las oposiciones a ser humano. Hace tiempo que lo pienso.

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  11. Ahora nos bombardean con imágenes crueles, que como bien has dicho, en otras zonas más cercanas, no sacarían, que si conciertos benéficos, etc etc etc. Pero dentro de unos meses cuando todo vuelva a la normalidad (para nosotros), no nos mostraremos tan "solidarios" como cuando ocurrió el vendabal. Parece que nuestra naturaleza humana no nos permite ir más allá, y con blos como este quienes quieren ir más allá, pueden hacerlo..

    Gran entrada, Ne ;)

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  12. Muchas gracias a todos por dejar vuestras reflexiones en mi blog, me alegro de que podamos analizar las cosas entre todos desde otra perspectiva, eso es lo que pretendo.

    Aquí os dejo un último apunte en relación a la situación que se vive en Haití para los que no hayáis visto el vídeo o no lo hayáis escuchado por la radio:

    Fran Sevilla (Rne) desde Haití

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  13. Escalofriante entrada... y lo peor es que dentro de poco todo esto quedará simplemente en la memoria de la mayoría, pero cubierto por un tupido velo en forma de otra noticia de más actualidad, o por el egoismo de anteponer nuestras propias "miserias" verdaderamente miserables por el sólo hecho de compararlas a las de esta gente.

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  14. Qué razón tienes, Luis... es algo que ya se puede comprobar, ya se está relegando a un segundo plano hasta que pronto llegue el día en que nunca más se vuelva a saber del tema, a no ser que cada uno haga el "esfuerzo" de buscar la información. Gracias por pasarte.

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